No cabe duda de que los nuevos modelos de coworking y las tecnologías de la comunicación han cambiado nuestra forma de trabajar. La videoconferencia, el email, las redes sociales o el cloud computing nos permiten estar en contacto con nuestros colaboradores y compartir tareas sin necesidad de estar físicamente en el mismo lugar.
Hay compañías que han llevado esta idea aún más lejos, hasta el punto de que trabajar desde casa, un café, un parque o cualquier otro lugar que no sea la oficina constituye uno de los pilares de su negocio. El teletrabajo les ha hecho facturar cifras récord y alcanzar unos niveles de ahorro valorados en cientos de millones de dólares. ¿No te lo crees? Aquí van algunos ejemplos:
Cisco Systems: trabajar a distancia les hizo entrar en el Dow Jones El gigante norteamericano Cisco Systems nació en 1984 y desde su inicio tuvo el teletrabajo muy presente. No es para menos teniendo en cuenta que su actividad se centra en el diseño, producción y venta de equipos de redes informáticas y telecomunicaciones. Así, no es de extrañar que en prácticamente todas sus delegaciones repartidas por el mundo el número de empleados que trabajan de forma remota supere al que lo hace de forma presencial. La clave es que la propia compañía es la que se encarga de diseñar las herramientas que utilizan sus empleados para conectarse y trabajar a distancia, y que luego venden a otras empresas. En una conferencia sobre teletrabajo celebrada en 2008 en Argentina, el Gerente de Empresas y Sector Público de Cisco afirmó que "Siempre remarcamos que el trabajo está donde estamos y no donde está nuestro escritorio. El teletrabajo forma parte de la filosofía corporativa. El desempeño se mide a través de los resultados de los empleados y los comportamientos, independientemente de cuándo, dónde y cómo trabajan". Desde hace algunos años todos los empleados de Cisco tienen habilitada la opción del teletrabajo. Esta apuesta por sacar el espacio de trabajo de las oficinas llevó en 2009 a la empresa a conseguir dos objetivos: por un lado generó 277 millones de dólares de ahorro, por otro se superaron los objetivos de facturación estimados y la compañía entró a formar parte del Dow Jones. Apple Store: que todos los programadores del mundo trabajen para nosotros La Apple Store es otro ejemplos sobre cómo aprovechar las herramientas TIC y el nuevo escenario de coworking que posibilitan para crear un negocio global. Apple ha conseguido gracias a este modelo que los programadores de todo el mundo trabajen para la compañía de la manzana, sin firmar un solo contrato laboral, sin que pisen una oficina de la compañía y sin ni siquiera importar dónde viven. ¿Cómo lo han conseguido? Cuando Apple lanzó su tienda de aplicaciones para iPhone tenía dos opciones: contratar a los mejores desarrolladaores para que trabajaran en la compañía, o habilitar un sistema para que cualquier desarrollador del mundo pudiera crear libremente una app sin limitaciones geográficas. Aunque no es teletrabajo propiamente dicho, ya que las aplicaciones se crean por iniciativa propia en lugar de por encargo, la Apple Store ha generado un ecosistema de coworking que facilita el trabajo a distancia. Es un sistema win-win en el que, por un lado la empresa se beneficia del talento de cualquier programador creativo, y por otro éstos encuentran una vía para dar rienda suelta a sus habilidades y de paso ganar un dinero con las facturaciones. The Huffington Post: las tareas se realizan a distancia, pero se empaquetan en un mismo lugar El Huffington Post es otro modelo de negocio que ha sabido aprovechar las herramientas TIC, aunque con algunas singularidades. Su creadora se dio cuenta de que para publicar un buen producto informativo no hacía falta tener una docena de periodistas en la redacción. El lugar desde donde se escriban las historias no es lo importante. Cientos de redactores escribían sus artículos en blogs que, posteriormente, eran agrupados por Adriana Huffington en su plataforma. Cierto es que la política de retribución del Huffington Post ha sido motivo de críticas y denuncias, pero es innegable que su visión sobre el papel que las tecnologías TIC y los modelos de coworking y trabajo a distancia pone de manifiesto que no es necesario que para ser más productivo haya que obligar a todos los empleados a coexistir en una misma oficina. En un mundo cada vez más global las distancias físicas cada vez presentan menos inconvenientes… incluso para hacer crecer una empresa. Y encima pueden suponer una ventaja competitiva cuando se dan condiciones adversas. Imagen: mccun934